MEN IN BLACK.- Quiero contarles algo que me ocurrió hace años, algo que todavía me atormenta y me hace cuestionarme la naturaleza de nuestra realidad.
Estaba estudiando en la universidad, en Monterrey, ya padre había fallecido unos meses antes, una pérdida que me dejaría marcado como a todos.
Para llegar a la facultad tomaba dos camiones de la ruta. Siempre me gustaba sentarme junto a la ventana, quizás porque mirar hacia afuera me daba una sensación de tranquilidad en medio del bullicio de la ciudad.
Aquella tarde todo parecía normal.
El trayecto duraba unos 40 minutos, tiempo suficiente para observar a las personas en las calles: gente conversando, esperando el transporte, o simplemente cruzando avenidas.
Era un día común, hasta que lo vi. Ahí, entre la multitud en la esquina de una avenida, estaba mi padre.
Lo reconocí de inmediato. Vestía su clásica combinación de tonos café, fumaba con esa calma que siempre lo caracterizaba, y tenía la misma postura que recordaba tan bien. No podía ser.Cerré los ojos, pensando que era producto de mi imaginación o un simple reflejo. Pero cuando los abrí, seguía ahí.
Era él, con su rostro sereno, mirando al frente como si estuviera esperando algo. No volteó, no hizo contacto visual conmigo, pero estaba completamente seguro de que era mi padre.
Intenté reaccionar, gritar o hacer algo, pero justo en ese momento, el semáforo cambió y el camión aceleró.
Lo seguí observando por la ventanilla hasta que desapareció entre la multitud.
Ese día no pude concentrarme en nada más. ¿Qué había visto? ¿Era un fantasma? ¿Un glitch en la Matrix?
Con el tiempo, me topé con teorías que hablaban de los llamados NPCs (Non-Playable Characters), figuras que según ciertas creencias están en esta realidad simulada para llenar espacios o cumplir funciones específicas.
Estas teorías dicen que los NPCs no son realmente conscientes; simplemente actúan de manera automatizada, como los personajes de un videojuego.
Pero, ¿por qué habría un NPC idéntico a mi padre? ¿Era solo un error del sistema?
Por otro lado, algunos creen que podría haber sido una manifestación espiritual.
Hay numerosos testimonios de personas que afirman haber visto a familiares fallecidos de forma tan real que parecía imposible que no fueran ellos.
¿Qué tal si era su espíritu intentando comunicarse? Quizás para decirme algo que no logró en vida, o simplemente para hacerme saber que seguía cuidándome.
He leído sobre casos similares. Por ejemplo, un hombre en Chicago asegura que, semanas después de la muerte de su hermano, lo vio en un parque donde solían reunirse, sentado en la misma banca, leyendo un libro como siempre.
O el caso de una mujer en Japón que dice haber visto a su madre fallecida durante un festival, caminando entre la multitud y sonriéndole antes de desaparecer. Estos relatos me han hecho pensar que tal vez lo que vi no fue tan único, pero sigue siendo aterrador.
Hoy, años después, sigo sin respuestas. Cada vez que recuerdo esa escena, el rostro de mi padre, su forma de fumar, su calma... siento que me observa desde un lugar que no alcanzo a comprender.
Y esa pregunta me persigue: ¿vi un NPC de la Matrix, un glitch en nuestra realidad, o el espíritu de mi padre?
No lo sé, pero hay algo que sí puedo decirles: la próxima vez que vean algo que desafía su entendimiento, no lo ignoren.
Tal vez, solo tal vez, el universo nos está mostrando un fragmento de una verdad que no estamos listos para comprender.
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